A partir de octubre, el gobierno de Corea del Sur comenzará a aplicar estrictas medidas para reducir la masificación turística en Bukchon Hanok, un distrito histórico en el corazón de Seúl.
Este popular destino turístico, conocido por sus tradicionales casas coreanas “hanok”, ha sufrido un aumento excesivo de visitantes, lo que ha generado conflictos con los residentes locales.
¿Qué medidas se están tomando?
Entre las medidas anunciadas, destaca la creación de una “zona de gestión especial” bajo la Ley de Promoción Turística.
Esto implicará restricciones de acceso para los turistas, incluyendo un toque de queda diario entre las 10:00 y las 17:00 horas para los no residentes.
Además, los autobuses turísticos chárter tendrán prohibido ingresar en ciertas zonas del distrito, con el objetivo de reducir el tráfico y priorizar a los peatones.
Para garantizar el cumplimiento de estas nuevas normas, las autoridades locales implementarán un sistema de control con zonas codificadas por colores: rojo, naranja y amarillo.
Este sistema permitirá monitorear las áreas con mayor afluencia de turistas y gestionar mejor las multitudes. Los infractores de estas nuevas regulaciones se enfrentarán a multas.
Estas acciones buscan preservar el carácter histórico de Bukchon Hanok y mejorar la calidad de vida de los residentes, quienes han sido afectados por el turismo desmedido.
Este esfuerzo de Corea del Sur se suma a la creciente tendencia global de frenar el impacto negativo del turismo masivo, que también ha llevado a otros países, como Grecia y España, a implementar medidas similares.