México ofrece una gama de experiencias únicas para los viajeros ávidos de descubrimiento. Entre ellas, la Ruta de la Sal en Colima se destaca como un recorrido especial que combina la exploración de los procesos de producción de sal con la apreciación de los impresionantes paisajes naturales del estado.
La Ruta de la Sal en Colima es mucho más que un simple recorrido turístico. Es una oportunidad para sumergirse en la historia y la cultura de la región, mientras se participa activamente en el proceso de producción de sal.
Organizada por Sal Real de Colima, la experiencia ofrece a los visitantes una mirada privilegiada a través de cada etapa. Desde la recolección hasta el empaquetado final.
El punto de partida de esta aventura es la pintoresca Laguna de Cuyutlán, reconocida como el corazón de la producción salinera en la región.
Aquí, los participantes pueden maravillarse con los impresionantes paisajes naturales y sumergirse en la atmósfera única de este entorno.
Los visitantes pueden involucrarse en el proceso de recolección de sal
Una vez en la laguna, los viajeros tienen la oportunidad de involucrarse activamente en el proceso de recolección de sal.
Guiados por expertos locales que comparten su conocimiento y pasión por esta industria ancestral. Esta experiencia no solo es educativa, sino que también permite una conexión íntima con el entorno natural y la comunidad local.
Además de la participación en la recolección de sal, los visitantes pueden explorar las instalaciones de Sal Real de Colima y visitar su tienda local.
Ahí pueden adquirir productos artesanales como recuerdo de su experiencia. Es importante tener en cuenta que la Ruta de la Sal está disponible durante los meses de marzo a mayo.
Coincidiendo con la temporada en que el agua de la laguna se evapora para formar los cristales de sal característicos.